Llegamos a Plaza Flores 16 hs. un poco cansados. La noche LDV del Viernes en Palermo Club había terminado en la mañana del sábado. Otra bailanta con acordeón había atado la luna con el sol (Zitarroza dixit).
De a poco llegaron los instrumentos y el resto de los músicos con los que íbamos a emprender una manifestación musical en la vía pública, con el objeto de… mejor no se lo explico, mejor lea y vea pa’ qué.
Se me ocurre pensar que a veces un resultado electoral, que puede implicar un largo proceso de razonamiento interior o simplemente el ejercicio físico de meter una boleta dentro de la urna; dice poco (o algo, pero no todo) de una persona, de una ciudad, de un pensamiento, de una vida que se tiene y otra que se (re)quiere… piense usted porqué.
Lo cierto es que ahi estabamos. Cuando la Delio Valdez empezó a sonar la gente se empezó aquerenciar, al principio con timidez y siempre con aprecio. No hubo distinción de sexo, edad, ni situación habitacional. Había de las doñas que pasaban con la bolsa del mandado y se quedan canturreando unas cumbitas, estaban también las familias con asistencia perfecta: padre madre y cochecito de bebe, y no faltaban aquellos a los que la vida les ha jugado una mala pasada y tienen que andar cargando su casa a cuestas… y resulta que cuando te quisiste acordar en el baile estabamos todos, los que votaron a uno, otro o ninguno.
Íbamos a tocar tres temas y tocamos quince… piense usted porqué.
Una imagen me despabiló. Vi a la arquetípica Doña de Barrio, sonriendo ante el endiablado paso del que por las noches calienta el banco de la plaza (que pensará el uno del otro cuando se ven, al pasar, en la semana?). Y vi a ese hombre, al que el tren de la vida lo confinó al furgón trasero, desparramar su fuego interior al son de los tambores regalando a los presentes un poco de su rica cultura.
Ahí estábamos todos compartiendo ese momento, cada uno aportando con su alegría al convite general… piense usted porqué.
La cultura está a la vuelta de la esquina y para quien quiera degustarla. Están los que la hacen, los que las disfrutan y los que las dos cosas. Es más que un escenario y luces. Es más que globos y Gilda. Es un camino (entre tantos) para encontrar aquello que nos hace sentirnos a gusto con lo que es el otro.
No es magia, pero la música tiene ese poder. Lástima que Macri no esté interesado en ello… piense usted porqué.
Este Jueves 20 Hs - Boedo y Psje. San Ignacio - Gratis
LDV vs. Macri 2do Round.
Basta de Macri.
3 comentarios:
por cosas como éstas es que los quiero escuchar en todas las vidas que se (nos) vengan! aguante LDV arriba y abajo, en todos los escenarios!
Aguante barb Matata!
Que palabras! Espero que lleguen a quienes les tengan que llegar.
Aguante la delio.
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